INNOVADORA TENDENCIA EN CIRUGÍA ABDOMINAL
ABDOMEN TERSO, TONIFICADO Y CON UNA FORMA NATURAL
La zona abdominal es una de las partes del cuerpo que más preocupa a las personas que les gusta cuidarse porque es un lugar donde la grasa tiende a acumularse y cuesta mucho deshacerse de ella siendo, a veces, una tarea imposible de conseguir incluso con dietas o ejercicio. También hay que saber que el abdomen suele dilatarse y deteriorarse debido a múltiples factores como embarazos, desajustes hormonales o pérdidas drásticas de peso que acaban aflojando los músculos abdominales.
OBJETIVO: UN ABDOMEN ESBELTO
Embarazos, cambios de peso y desórdenes hormonales pueden provocar esa grasa abdominal tan difícil de eliminar que sólo puede suprimir la cirugía.
BENEFICIO PARA LA SALUD
Además de los inconvenientes estéticos que ocasiona la grasa localizada en la tripa, la distensión de los músculos abdominales pueden causar problemas de salud como trastornos en el transito intestinal así como hernias umbilicales y abdominales.
Para reparar esta situación la mejor técnica es una abdominoplastia, una cirugía que actúa sobre la pared del abdomen reafirmando esa zona dando como resultado el ansiado vientre plano y mejorando los problemas de salud.
Los cúmulos de grasa y distensión muscular en el abdomen no solo provocan problemas estéticos sino que también producen trastornos de salud, entre ellos, en el aparato digestivo.
Las técnicas de reducción de la grasa y remodelación abdominal han avanzado muchísimo, siendo la lipoabdominoplastia el procedimiento más innovador al compaginar la liposucción y la abdominoplastia tratando piel, músculos y contorno. Es un técnica revolucionaria con la que se consiguen resultados impecables, bellos y naturales. La abdominoplastia tradicional solo podía lograr un vientre plano pero sin forma alguna, excesivamente uniforme, alejado de la concepción estética basada en el movimiento grácil y apreciado que otorga la forma muscular.
La remodelación del abdomen para que luzca tonificado, terso y esculpido es una de las intervenciones quirúrgicas más demandadas por hombres y mujeres.
La lipoabdominoplastia repara y restituye la pared del abdomen, eliminando para ello la piel, la grasa y los pliegues sobrantes, y tensando los músculos del vientre. Esta remodelación implica una intervención más compleja que requiere una mayor habilidad y destreza por parte del cirujano que no sólo se dedica a estirar la piel sino a esculpir y dar forma a un conjunto muscular creando con volúmenes líneas esculturales. El resultado es un vientre tenso, tonificado estilizado con relieves naturales con aspecto elegante y esbelto.
Lipoabdominoplastia no solo elimina la grasa del vientre sino que da forma al tejido celular subcutáneo para que podamos lucir un abdomen terso y definido con relieves naturales.
Además de eliminar la grasa y piel sobrante esta intervención se basa en la restitución del tejido celular subcutáneo, lo modela y a la vez potencia la forma muscular que hay debajo. Esta técnica reconstruye la pared abdominal para mejorar tanto el aspecto estético como la dimensión funcional del abdomen, eliminando si fuera necesario hernias umbilicales y abdominales. En ocasiones la lipoabdominoplastia también actúa sobre el aparato digestivo mejorando su funcionamiento.
La lipoabdominoplastia es una de las cirugías que más influye sobre el aspecto estético y la figura pero también proporciona unos relevantes beneficios para la salud.
La lipoabdominoplastia no se recomienda en todas las personas y por ello es imprescindible una primera visita al cirujano plástico que será el que decida, junto con el paciente, qué procedimiento se llevará a cabo en función de sus características.
Esta cirugía no está indicada para perder peso ya que su objetivo es suprimir los cúmulos de grasa que no se elimina, así es que cuanto mejor condición física presente el paciente, mejores resultados se obtendrán. Si estás pensando en esta cirugía ahora es un buen momento para planificar tu cirugía que te haga lucir el abdomen que siempre has deseado.
El otoño y el invierno son estaciones ideales para llevar a cabo esta cirugía porque el calor hace que la recuperación sea más molesta.